Sofipos son una gran apuesta por la carga regulatoria: entienda las razones
Las Sociedades Financieras Populares (Sofipos) han emergido como una opción atractiva en el panorama financiero, especialmente para las empresas de tecnología financiera.
En los últimos años, compañías como Stori o Klar han mostrado interés en este sector, incluso adquiriendo empresas relacionadas con Sofipos.
Esta tendencia sugiere un movimiento estratégico hacia la oferta de productos de ahorro e inversión a través de estas entidades reguladas.
¿Por qué las empresas de tecnología financiera eligen Sofipos?
La decisión de las empresas tecnológicas de integrarse al sistema financiero regulado mediante una Sofipo, en lugar de optar por otras entidades como los bancos, está influenciada por varios factores.
Según Víctor Aguirre, socio de la firma legal BlackBlox, la carga regulatoria es un elemento crucial.
Obtener una licencia bancaria implica un desafío significativo, equiparable a obtener un doctorado en estudios financieros, mientras que operar a través de una Sofipo es menos exigente en este aspecto.
Además de la carga regulatoria, Aguirre destaca otro atractivo: los requisitos de capital social.
Mientras que el mínimo requerido para una Sofipo es de 100,000 Unidades de Inversión (UDI), para un banco especializado en un segmento, también conocido como banco de nicho, el mínimo asciende a 36 millones de UDI.
Esta diferencia en los requisitos de capital hace que las Sofipos sean más accesibles para algunas empresas de tecnología financiera, especialmente aquellas con capital limitado.
¿Cuáles son los riesgos asociados con Sofipos?
A pesar de sus ventajas, operar a través de una Sofipo conlleva ciertos riesgos, especialmente en términos de disciplina financiera. Las empresas deben mantener una disciplina financiera estricta para evitar problemas financieros que podrían afectar su operación.
La falta de disciplina financiera puede resultar en casos de insolvencia, lo cual es un riesgo que las empresas deben considerar cuidadosamente al optar por este modelo.
Víctor Aguirre señala que los objetivos de las Sofipos difieren de los de los bancos. La Ley de Ahorro y Crédito Popular (LACP) establece que las Sofipos tienen una función social, no meramente rentable.
Estas instituciones están diseñadas para ofrecer servicios financieros principalmente a personas de bajos ingresos y operar en situaciones de emergencia. Sin embargo, las Sofipos también tienen la capacidad de realizar actividades de intermediación, lo que las distingue de otras entidades financieras.
Diferencias con los bancos
Es importante destacar que las Sofipos tienen objetivos distintos a los de los bancos. La Ley de Ahorro y Crédito Popular (LACP), que regula a las Sofipos, fue concebida para las finanzas populares con objetivos específicos.
“Las Sofipos tienen una función social que va más allá de la rentabilidad. Su objetivo principal es ofrecer a las personas operaciones de emergencia. No obstante, también se les permite realizar actividades de intermediación financiera, que son actividades reservadas a entidades reguladas”, explica Aguirre.
Los usuarios
En cuanto a los clientes, las Sofipos presentan un perfil de riesgo distinto al de los bancos, ya que otorgan crédito a una audiencia menos atendida por estas instituciones. En este sentido, Aguirre resalta la importancia de que los usuarios consideren los límites de aseguramiento de sus ahorros en cada entidad.
En el caso de las Sociedades Financieras Populares, el Fondo de Protección de Sofipos respalda los depósitos de los ahorradores hasta un máximo de 25,000 UDIs o 203,225 pesos, según el tipo de cambio al 9 de abril de 2024.
Por otro lado, en el ámbito bancario, el Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB) ofrece una cobertura de hasta 400,000 UDIs o 3 millones 251,603 pesos, calculados en el mismo periodo.
Consideraciones adicionales
a) Es importante mencionar que, si bien las Sofipos ofrecen ventajas en cuanto a la carga regulatoria y el capital social, también tienen algunas limitaciones. Por ejemplo, las Sofipos no pueden captar depósitos del público en general, lo que limita su capacidad para obtener financiamiento.
b) A pesar de las ventajas de las Sofipos, algunas empresas Fintech, como Nu o Revolut, han optado por obtener una licencia bancaria. Esto podría deberse a que buscan ofrecer una gama más amplia de productos y servicios, o a que tienen planes de expansión internacional, para lo cual una licencia bancaria puede ser más ventajosa.
c) En última instancia, la decisión de optar por una Sofipo o una licencia bancaria dependerá de las necesidades y objetivos específicos de cada empresa Fintech. Se recomienda realizar un análisis exhaustivo de las ventajas y desventajas de cada opción antes de tomar una decisión.
Conclusión
Las Sofipos se han convertido en una alternativa atractiva para las empresas Fintech que buscan incursionar en el sector financiero regulado.
Su menor carga regulatoria y sus requisitos de capital social más accesibles las convierten en una opción viable para empresas que buscan ofrecer productos de ahorro o inversión.
Sin embargo, es fundamental que las empresas que opten por este modelo implementen una disciplina financiera sólida para alcanzar el éxito y cumplir con la función social que les caracteriza.
Esperamos que esta información te haya sido de gran utilidad. Muchas gracias por leernos.
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